En mi tiempo libre me dedico a escribir y paso por mi cabeza subir a internet mis cuentos espero que les gusten y dejen su comentario, saludos.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Puede que el tiempo me confunda

puede que cada una de las razones por las cuales pensamos por las que hemos soñado hallan terminado jamás la razon escucharía aquellas palabras ni un solo momento de la realidad en la cual nos hemos sumergido desde ahora hasta el final pueden haber palabras sujetos que nos armarian cada una de las cosas del alma puede existir aquella razon de la cual el sueño jamas podria esconder.
si solo existiera un momento por el cual todo volviera atrás, si aquellas palabras que terminaba de escuchar si solo alejaramos las razones por las cuales podemos soñar: no seriamos como aquellos cuentos en los que la princesa despierta con un beso no seriamos mas que humanos en una realidad que en vez de soñar solo aprendemos a luchar ya nada es como lo mismo que aprendemos ni nada es como nadie nos enseño... si cada caricia cada instante solo es un tiempo que creo distante.

martes, 11 de mayo de 2010

EL AMOR ES COMO EL VIENTO NO LO PUEDES VER PERO SI SENTIR...

Todo tiene un comienzo...-

Si los sueños son solo lo que hemos pensado porque vivimos una vida que tratamos de soñar si en tus caricias mi vida encontrare cada día que te pienso te vuelvo a ver…


Efecto primavera todo posee un comienzo


A veces no hay razones para correr, pero cuando la encuentras solo corres sin mirar atrás esperando que la escapada no te haya delatado. Ya el hecho de estar en este lugar me aterra vivo atrapado en mi condena pero no quería que todo terminara como culmino, acaso mi alma no puede dejar de odiarte o simplemente amarte. Huyo de tu recuerdo como ese cuento que se repetía una y otra vez antes de dormirme, ya no queda más que mi propia mente consumida por el tiempo. El comienzo de cada uno de mis tormentos me inquieta, mata y duele en mi interior. Estoy desconectado o soñando, el tiempo corre lento y fugaz, a la vez ya no soy el joven de 17 años dependiente de sus padres ahora son 23 y todos aquellos sucesos me han llevado a donde estoy. Para mis padres soy el sabio, correcto el joven que estudia pero en mi son el mismo estúpido que tiene miedo de encontrar otra vez ese camino que me hizo dudar. Es una sensación de ardor como el veneno corre por la venas similar a la rabia pero mas intenso, es un estado de locura, por alguna razón tenía que ser justamente ella la que encontrara ahí y no él, un perfecto plan pero que termino con alguien que me amo pero que yo no supe amar. Éramos tan adolescentes que no mediamos las consecuencias de cada uno de nuestros hechos, cada cosa se volvía en un perfecto juego, no estaba solo en esto y nunca lo estuve, fuimos el típico grupo de la escuela donde se encontraba un líder los que llamaban la atención y que jugaban con las compañeras siendo que después no serian simple compañeras. Hasta ese momento iba todo bien, salvo que siempre esta esa pregunta la cual causa risas, confesiones pero ahí esta el niño respondiendo ese que esconde todo lo que siente, mintiendo, en ese momento creo que cambie tantas cosas que ni yo mismo las podía controlar, pronto viajaría y si dejaba la escoba no importaba el hecho de no estar por un tiempo en ese lugar la gente olvidaría cada una de mis palabras, pero no fue así mi viaje duro menos de lo programado, pero ya no tenia contacto con ninguno de mis amigos, era como volver a una cueva donde muchos múrcielos estaban esperando por mi sangre o era una simple mi alucinación. Aquella mañana de Noviembre, mis ojos veían como las rosas eran tocadas por los rayos del sol, su aroma su… y no puede decir nada más, mis ojos admiraron a una joven de lindos cabellos largos color caoba, delgada. Esperaba a alguien y cuando me di cuenta quién era, creo que fue demasiado tarde era de la misma chica de la cual me había burlado, pero estaba junto a mi mejor amigo, en ese momento mi cuerpo se enrabio y mi mano tomo una ruta equivocada chocando con la muralla sentí como cada uno de mis huesos se rompían y un tono rojizo la empapo por completo, no dije nada saque una sudadera que en ese momento llevaba en mi bolso, me vende torpemente y camine sin sentido a donde me esperaba mi fin, sabia que cada una de las palabras que pronuncie aquel día estaban en mi contra, ya todo había cambiado. Pronto me percate, el destino no estaba de mi parte puso junto en el momento inesperado a aquella joven escuchó cada una de las cosas que dijo mi boca ella me quería pero no dudo en estar con alguien que le dio ese amor que yo mismo le negué. Y de ese entonces mi vida no fue la misma, hacia lo imposible para no estar cerca de nadie, dedicaba el tiempo a leer estudiar materias, estar en lugares que ni yo mismo me imaginaba, subía a los árboles para distraerme muchas veces me llamaron la atención, pero se cansaron un poco o solo el hecho de encontrarme siempre con un libro justificaba mi rebeldía, de vez en cuando olvidaba entrar a clases o me hacia el desatendido y me largaba a la biblioteca, mis manos se volvieron dueñas del dolor y sangre, pero ya el hecho de ser siempre el ausente asustaba a la gente, nadie se acercaba. Nadie imaginaba en un abrir y cerrar de ojos un alma dejaría de existir, me recosté en la parte mas lejana aquellas fuerzas que me mantenían en pie frente a ellos pero ya en las tardes se me hacia imposible aguantar, las clases electivos me ayudaban demasiado a escaparme de cada uno de los rincones, pero no de las voces que podía oírlas detrás de mi, muchos dirán es un simple amor pero para mi fue el error que mato todo lo que estaba en mi, noto que ya en mi no hay emociones no se si odiarla para poder olvidarla las he perdido; a la distancia logre ver a una niña ocultada detrás de un árbol escribiendo quise ir a su lado y escucharla hablar, pero en el instante que me vio escapo. Por primera tuve la necesidad de seguir a alguien, sentía como la sangre palpitaba por mi cabeza era el perfecto imán. Mi carrera dio triunfo cuando se detuvo porque había perdido el cuaderno en donde escribía o era lo que pensaba cuando logre ver que eran bocetos donde yo aparecía, la mire atentamente sus largos cabellos oscuros, ojos que penetraban, lindos labios y delicioso aire que nos rodeaba. Todo podía ser perfecto pero con un movimiento repentino me quito los bocetos y corrió esta vez no quise seguirla mis pies clavados en el piso por culpa de aquella confusión era un idota, pensando en otra mientras tenía a quien admirar. Mi vida si se puede llamar vida a lo monótono que me había vuelto para no pensar en lo que temía era mas esa realidad, de negarme una vez ese error me aterraba, pero esa razón escondió mi corazón. Y solo logre ver lo que mis ojos querían ver. Los días siguieron pasando con tanta lentitud, pero cada momento era mas intenso, ya mis manos estaban sanas ya el dolor se aparto. Me impacientaba algo, volví a acudir al mismo lugar donde la por primera vez note su existencia no pude verla, en vez de ella encontré su carpeta de bocetos afirmados por una roca, en ellos plasmaba cada uno de mis lugares, pintados detalladamente a carboncillo, hasta mi ira con la muralla se retraban; miles de recuerdos volvieron a mi mente cada uno imaginándola junto a mi y un escalofríos recorrió mi cuerpo el hecho de ver retratado aquel día que desperté de mi sueño esa nota que decía “hoy es el fin”, mi sangre fluía con mayor rapidez, cada latido era como si fuera el último, miedo que congela cada una de mis piernas. Lentamente camine y me encontré con aquella chica con brazos al viento como entregándose no dude en lo mas mínimo la tome de la cintura con sus ojos clavados en mi miranda me acerque a sus labios nerviosa contesto cada uno de mis besos, aunque cada vez se volvían mas intensos era como guardar el recuerdo de cada uno de ellos como si fuera el que terminara, tome sus manos una sensación de apodero de mi, me aparte de sus labios logrando ver el daño de sus muñecas, no hubo palabras no tenia nada para curarla me saque la camisa y trate de romperla para vendarla, hasta que pude escuchar su voz, una voz inolvidable pero marcada por la pena el aliento me ataba mas a su piel, sentía vergüenza sus mejillas estaban completamente rojas se incomodaba verme el torso desnudo pero deseaba estar cerca de su cuerpo. Solo cuando escuchamos un grito desconcertado, nos dirigimos a toda prisa y encontrándonos con el cuerpo en el piso de aquella joven que amaba en un comienzo pero al lado de está una frase “Adiós”, todo el rompecabezas encajó que preferí huir de ese lugar, si la mentira ocasiona el hecho de la muerte, ya que ha sido ella a quien encontramos tumbada en el suelo sin rastros de vida. Me había convertido en la apuesta, aquella que perdiera debía llevar consigo la muerte. Los celos eran simplemente para que me comiera cada una de las palabras que mis labios pronunciaron y el destino fue el que me abrió los ojos a un verdadero amor que temo, amo o debo odiar… Todo es tan confuso que prefiero olvidarme de todo, tengo tanto miedo de ser el culpable de todo solo me queda el recuerdo de su mirada, sus labios junto con los míos pero de volver a verla, prefiero escapar y vivir en otra realidad. Y así están las cosas 23 años y no he sabido nada de nadie, mi vida se ha vuelto sin amor, pero cuando iba caminando pude ver una silueta de unos brazos al viento un pelo largo y oscuro buscando algo en particular seguía sintiendo como un niño necesitaba estar en sus labios en sus brazos, en mi nació otra vez ese miedo de no conocer la verdad de aquello que ocurrió ¿qué debo hacer?
Los hombres están invadidos por la arrogancia o la estupidez, y si son afables es muy fácil manejarles porque no tienen un criterio propio.