parte del cuento que estaba escribiendo EFECTO PRIMAVERA corresponde al cuento dos

En instantes cuando solo queremos que termine el día y dormir para no pensar, es cuando más eternas se hacen las tardes; logro ver esos árboles renacer con su color verde, las aves cantando y esas rosas tomando su tono rojo. El tiempo había cambiado y yo también lo hacía.
Puede un corazón programado en cada tiempo de respiro, el no palpitar por un amor, o simplemente planificar los tiempos para no sentir por el miedo de perder la razón, diría lo mismo si mi corazón no palpitara tan fuerte cada vez que lo veo pasar frente a mis ojos hasta cuando lo pienso. Tardes aquellas que la mirada que busco siempre me espera tengo al tiempo que es mi amigo siendo enemigo a la vez nos condena a callar en silencio lo que debemos decir. Puede verte todos los días caminar, sonreír, hasta tropezar y correr; pero ahora te miro con tanta ternura escondida entre la multitud que acompaña tu vida pero siempre al pendiente cuando te veo.
Mi búsqueda acompaña aquel camino, tus ojos se encuentran con los míos pero se vuelve inútil hablar ya que tu seriedad nos ata mas tu arrogancia, pero es como verme yo misma reflejada en ti; dormido en instantes con un libro en frente o simplemente escuchando música te encontré mirando por la ventana mientras yo iba en otra troncal pero ahí estabas en el mismo lugar que yo mirando a tu alrededor, pensar que los tiempos son distintos pero te logro encontrar aunque no desee hacerlo, he pasado frente a él como él a mí. Es como que aparecer por error dispuesto a desordenar mis pensamientos, pero tan extraño se vuelve seguirte con mi mirada puedo estar platicando por completo con la gente pero te siento sin necesidad de conocer tu voz solo mi mirada te encuentra y te sigue hasta que te pierdes en el camino… horrible el no saber qué hacer para hablar estando tan cerca y a la vez tan lejos, pero como el reflejo es el perfecto miedo que escoges callar en vez de hablar… acaso el miedo toma partido de las cosas y aterra nuestra vida, ¿puede acaso haber un miedo que asuste mas en esta vida, que nuestra misma existencia? Si pensamos aquel miedo es solo nuestro el pensar que equivocaremos o que asustaremos por ser como somos pero como la gente puede asustar a mismo tipo de personas, en instantes pienso que los seres humanos nos convertimos en los perros que marcamos todo lo que poseemos y que lo extraño simplemente lo alejamos pero mientras más vamos conociendo poco a poco nos vamos encariñando.
Un ser humano siempre tendría la razón de encontrarse con otro, somos como las rosas que escoges por un aroma o color, te enfadas porque una espina se clave en tu dedo pero tu hermosura hace olvidar ese momento desagradable, es como si se llevara algo de ti… con el tiempo la vez marchitar y perder sus pétalos la cobijas en un libro, en aquella página que marca un recuerdo o esa frase que acompaña el momento y la olvidas, encontrándola cada vez que la necesitas, es como las cenizas de los inciensos que aunque estés acabados su olor está ahí o esas velas que su perfume hace reconocerlo, es como sentir a un ser amado. Han pensado en perder lo que sienten ser un ser congelado bajo tierra, porque perder lo que se tiene por ganas de dejar todo tirado, si mas que amar con los labios con la pasión es encontrar solo un corazón escuchar el palpitar y renacer como lo hace la naturaleza cuando aprendemos a creer, nunca un árbol a dejado de existir porque aun no alcanza el sol, solo lucha por alcanzarlo o un pájaro de cantar por perderse de su manada, somos vida pura un camino que hay que pisar, letras que escribir y amores que desear… no significa perder la razón si un corazón egoísta no nos escucho pero si es estupendo soñar que puedes recorrer sus labios, sentir sus brazos y su voz solo siendo prisionero de un corazón olvidando esa razón que en los sueños jamás pensó…